El Belén Viviente recobra su actividad con la vista puesta en ser declarado Fiesta de Interés Turístico Regional

La A.C. Aceña retoma la representación tras dos años de parón por la pandemia en el polideportivo de El Cascajo con hasta cuatro representaciones gratuitas con espacio para 2.000 asistentes por sesión

Han pasado ya 24 años. Corría el año 1999 cuando, de manera muy humilde y fruto de la ilusión de los catequistas de la Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción, daba comienzo el Belén Viviente de Laguna de Duero. A lo largo de este período, el evento ha ido in crescendo tanto en vistosidad como en número de asistentes, lo que llevó, con motivo del XX Aniversario, a iniciar las vías para que fuera declarado Fiesta de Interés Turístico Regional. Sin embargo, la pandemia ha paralizado todo, incluso las propias representaciones.

“Pese a ese parón, hemos aumentado en cuanto a socios y simpatizantes. Este período ha sido muy triste y una vuelta atrás. Nuestro reto es volver con el mismo nivel o más que en el año 2019. La respuesta ha sido muy buena, pues hemos conseguido más personas que han querido formar parte de la asociación y prácticamente en un día hemos repartido todos los papeles de interpretación para el Belén Viviente de 2022. Hemos visto que la implicación de los socios ha aumentado, siendo ya más de 120 los integrantes que apoyan esta causa. Para este año contaremos con cerca de 125 personajes en la escenografía montada para tal fin en la pista polideportiva de El Cascajo. Esta edición hemos buscado diferenciar, aún más si cabe, la representación infantil de la general, sobre todo aprovechando que este año se cuenta con un mayor número de niños y niñas”, afirman.

Así, declaran que este año “hay mucha ilusión y ganas de volver a celebrar esta actividad”. En cuanto a modificaciones en el escenario, apuntan que no llevarán grandes cambios, optando por la línea de 2019, “entendiendo que estamos en una coyuntura económica complicada”. “A diferencia de otras ediciones, no se han buscado patrocinadores, aunque sí se ha optado por que aquellas empresas que quieran colaboren con el evento en la media de lo que se pueda. Somos una asociación sin ánimo de lucro, donde todo lo que recaudamos va de manera integra a la mejora del Belén”, apuntan desde Aceña.

Entre las novedades está la mejora de la vestimenta de los personajes. El chocolate caliente tampoco faltará, y esta edición llegará gracias a Leche Gaza, que ha donado de manera íntegra este producto para su elaboración. “Creemos que este año superaremos las expectativas de visitantes. No vamos a tener sitio para tanta gente tras dos años de parón. La gente tiene ganas de salir”, afirman.

En total habrá cuatro representaciones, mas la del día 5 de enero, con la adoración a los Reyes Magos. Estas arrancarán el día 25 de diciembre, como es ya tradicional, a las 19:00 horas. La representación infantil será el 26 de diciembre a las 13:00 horas, para dar paso ese mismo día a las 19:00 horas a la representación general. El colofón final llegará el día 6 de enero a las 18:45 con la tradicional representación y sorteo de regalos. Todos los interesados también podrán acudir el 18 de diciembre al ensayo general que tendrá lugar en el Cascajo.
Desde 2018, el Belén Viviente continúa con sus trámites para ser declarado bien de Interés Turístico Regional, pues es un evento con más de 20 años de antigüedad y uno de los principales reclamos para vecinos y visitantes en el período navideño. Esta propuesta ha sido ya trasladada al Ayuntamiento para que la documentación sea remitida a los organismos pertinentes para obtener dicha certificación.

Robo de material

La gran labor por sacar adelante el Belén Viviente este año se ha visto afectada por un robo, a principios del mes de noviembre, de todo el cableado de la instalación en el propio complejo de El Cascajo por un valor cercano a los 8.000 euros. La desinteresada aportación de dos empresas locales, como Herrera Lobato y Electricidad Galván, ha contribuido a que se pudiera remplazar el material y mantener el correcto funcionamiento de la representación.