Fecha: 9 mayo, 2019
El lagunero José Luis Frontela se encuentra realizando su tesis de fin de grado de ingeniería química en la Universidad de Concepción, donde investiga sobre la optimización tecnológica en materia de desinfección de aguas. Allí ha encontrado un lugar idóneo para adentrarse en la cultura latinoamericana y mejorar su perfil laboral gracias al carácter interdisciplinar en su labor del día a día.
Aunque jamás imaginó que fuese a realizar un Erasmus como colofón a su carrera, José Luis Frontela se lanzó el pasado año a la aventura americana siguiendo los consejos de su hermano Pablo y con el objetivo de abrirse puertas a nivel laboral. Hoy, realiza su tesis de investigación en el Grupo de Ingeniería y Biotecnología Ambiental en el Centro EULA-CHILE de la Facultad de Ciencias Ambientales en la Universidad de Concepción.
¿Cómo se te presentó esta oportunidad y cómo fue tu acogida?
El curso pasado salieron las plazas y solicitudes de la beca Erasmus Mundus, así que me informé y me llamaba la atención Chile debido a la posibilidad de estar un año entero, a la lejanía y a que me ofrecía una oportunidad única de conocer Latinoamérica. Llegué en julio, siendo pleno invierno en Chile. Tenía mucha incertidumbre, pero desde que bajé del avión en Santiago y vine a Concepción quedé impresionado por la amabilidad de la gente, la simpatía y la ayuda que me proporcionaban, ya que sienten respeto y admiración por la gente de España. Me he sentido bien acogido en todos los ámbitos, y hasta el momento estoy muy feliz aquí, no me costó nada adaptarme.
¿En qué consiste exactamente tu proyecto?
Mi Trabajo de Fin de Grado es una Tesis de Investigación sobre la optimización de la desinfección de aguas a través de las tecnologías Fenton (una reacción química) y Sono-Fenton (igual que la anterior pero asistida por ultrasonidos). En definitiva busco el punto óptimo de máxima eliminación de patógenos empleando una cepa modelo de una bacteria, y después lo aplicaré a las aguas que llegan a una planta de tratamiento para ver si se cumple con la normativa chilena de descarga de contaminantes a cuerpos de agua. Estoy aprendiendo mucho en el laboratorio junto a compañeros de diferentes áreas: ingenieros ambientales, bioingenieros, químicos o doctorados, ya que trabajamos en equipo mejorando las competencias transversales.
¿Qué diferencias hay en materia de desinfección de aguas entre España y Chile?
En ambos países hay normativas, pero en Chile las tecnologías empleadas no son tan novedosas por su alto coste económico y hay menos concienciación entre la población: vierten aceites o detergentes en lagunas o lavan los coches en plena calle. Aunque los ingenieros ambientales están bien preparados en Chile, hay muchas mejoras aplicables en los países latinoamericanos, y creo que en España la situación es óptima.
¿Qué ventajas y qué inconvenientes encuentras en tu vida en Concepción?
La principal ventaja es el idioma, que el transporte es barato, así como las entradas para el fútbol o el cine. En el mercado hay fruta y verdura buenas y baratas, y es una ciudad con población joven, mucho deporte y mucha vida. En cuanto a inconvenientes, se ve mucha gente pidiendo en la calle, hay conflictos a partir de ciertas horas en determinadas zonas o muchos robos.
¿Qué anécdotas te han marcado más en tu estancia?
Podría contar aquel primer día en el que fui a saludar con dos besos a una chica y sentí que me hizo ‘la cobra’, enterándome después de que en Chile tan solo se dan un beso en la mejilla. Otra anécdota podría ser el primer temblor sísmico que viví aquí: me desperté en mitad de la noche porque vibraba todo. Hay muchas otras cosas que sorprenden, como la gran cantidad de perros callejeros o que haya muchas chicas de entre 19 y 23 años con bebés, ya que el aborto es ilegal.
¿Qué mejoras necesita la investigación en España?
Es una triste realidad que muchos tengan que emigrar. Además de mayor financiación, creo que es necesaria una mayor motivación científica en los institutos. En mi sector mejoraría además la interdisciplina, algo muy desarrollado en mi grupo de investigación en Chile.
¿Qué es lo que más echas de menos de Laguna?
Sin duda alguna la familia y mis amigos de la peña Máximo Exponente, así como a todo el C.D. Atlético de Laguna. Echo de menos ir a ver al Real Valladolid, pasear por las afueras del pueblo o las fiestas patronales, a las que por primera vez en mi vida he faltado.
¿Cuáles son tus planes a medio plazo?
Aunque he tenido ocasión de viajar mucho por todo Chile, en mayo me adentraré en un viaje de dos meses en el que recorreré Perú, Bolivia y Paraguay para volver a España desde Buenos Aires. A nivel laboral aún no tengo nada decidido. Quizás curse algún máster o busque trabajo en España, aunque no descarto entregar mi CV por Chile, y a partir de ahí decidir qué hacer.