Fecha: 7 febrero, 2018
Directores y coordinadores de convivencia de la mayoría de los centros escolares del municipio advierten sobre la importancia de utilizar correctamente el término para evitar precipitarse a la hora de activar sus protocolos
Representantes de todos los grupos municipales del Ayuntamiento de Laguna de Duero y los directores o coordinadores de convivencia de la mayoría de los centros escolares del municipio se dieron cita este miércoles en el Consistorio para diseccionar la situación que existe, en cuanto al acoso y el ciberacoso, en el entorno educativo de la localidad.
El encuentro, organizado por la concejalía de Educación -y dirigido por la titular de este área, María Luisa Cortijo, con la presencia añadida de la edil de Juventud, Estela Crespo- sirvió para conocer de primera mano las actuaciones existentes en los centros de educación primaria y secundaria, cuyos representantes descartaron la existencia de casos explícitos de acoso en sus centros escolares y destacaron «la necesidad de que la familias se conciencien más al utilizar este término para evitar precipitarse a la hora de activar protocolos».
Los responsables de los centros pusieron en común los modelos de actuación que aplican, señalando la importancia de la existencia de un nuevo protocolo aprobado por la Junta a finales del pasado año. Los educadores se mostraron de acuerdo en que «es importante diferenciar entre problemas puntuales de convivencia y casos de acoso», destacando que «se ha llegado a dar el caso de tener activar el protocolo ante la denuncia de un caso de acoso para que después los padres pidiesen que este fuera eliminado al no existir tal situación de acoso».
Para ello, los representantes de los centros inciden en que es importante que los padres y madres estén informados de que para que exista acoso tienen que darse ciertas premisas, como que este sea persistente en el tiempo, que exista intención de hacer daño, un desequilibrio de poder entre acosador y acosado y que no se haya dado una provocación previa, sino que exista un abuso de poder. «Es importante que toda la comunidad educativa tenga conocimiento de esto, porque a veces hay algún conflicto puntual y no todas estas premisas se cumplen», destacó Elena Gimón -coordinadora de convivencia del IES María Moliner- quien insistió en que «la labor de prevención es básica e importante».
Los educadores señalaron asimismo que en los centros se aplican respuestas sancionadoras y labores preventivas a través de charlas, talleres y actividades, organizando incluso una red de alumnos que en cada clase informan de cualquier problema de convivencia, velando por el buen ambiente del grupo.
La reunión tenía su origen en la moción presentada por el grupo municipal popular a comienzos del pasado año, que fue aprobada por unanimidad y que buscaba «la prevención del acoso infantil». «Desde que se aprobó esta moción investigamos si existía algún caso de acoso en alguno de los centros educativos del municipio, y tras consultar a todos estos lo negaron», explica María Luisa Cortijo, quien considera que esta reunión «despeja las dudas de si existe algún caso de acoso en los centros escolares de Laguna».
Cortijo insiste en que el Consistorio se ha puesto asimismo en contacto con la Junta de Castilla y León y con la Policía Nacional, señalando que «no es una competencia del Ayuntamiento, y en caso de que se produzca algún caso son los centros los que deben ponerse en contacto con la Junta, que es quien debe aplicar sus protocolos e intervenir». «No queremos interferir en las acciones que realizan los centros para evitar este tipo de actuaciones, si bien considerábamos que debíamos reunirnos para detectar cualquier problema de convivencia al tratarse este de un tema tan sensible», afirma la edil.
Por su parte, y desde el PP, Alfredo Fadrique ha destacado que «en la moción presentada el pasado año no solo hablábamos de la prevención de acoso en las aulas, sino en otros entornos, e incluso en Internet». El concejal considera que «esta reunión ha sido un buen primer paso, pero echamos en falta campañas preventivas desde el Ayuntamiento que haga que este se implique, como por ejemplo en las actividades sociales y deportivas que organiza como institución», señalando que «es importante que los padres y educadores sepan cómo actuar» y recalcando que «en muchos casos este problema se produce fuera de las aulas».