Fecha: 19 junio, 2014
Las primeras casetas comienzan a ser instaladas. Antes del final de verano el barrio contará con las tres nuevas calderas de biomasa en funcionamiento y se llevará a cabo el revestimiento aislante de los bloques 1 a 7 de la fase uno
Las obras que llevarán la eficiencia energética a Torrelago ya están en marcha. Esta misma semana se han instalado las primeras casetas y, según fuentes del proyecto Cityfied, pronto habrá andamios en los edificios de la primera fase. A pesar del retraso -las obras estaban previstas para abril pero hubo problemas con la documentación a nivel europeo- se pretende que el próximo invierno las nuevas calderas de biomasa entren en funcionamiento.
Por el momento se ha empezado por operar en la caldera, aunque en pocas semanas comenzarán también los trabajos en las fachadas de los primeros bloques de la fase uno, en los cuales se instalará el aislante térmico exterior. Tal y como explicaba 3IA, empresa socia del consorcio, las fachadas se revestirán con varias capas de mortero y un panel aislante de EPS de 80mm de espesor, con lo que se espera reducir la demanda térmica de los edificios a la mitad. Ello reducirá el coeficiente de seguridad de la estructura, aunque según 3IA, esto supondrá un porcentaje insignificante, tal y como ha reflejado el informe anexo del proyecto.
Los acabados de los edificios aún estan por decidir en negociación con las comunidades de vecinos, aunque sí se adelanta que serán de granulometría fina para minimizar el efecto de la suciedad y que predominará un tono claro combinado con colores tierra y otros colores más vivos que aportarán una estética moderna. En cuanto al cambio de la red de calor, las tres calderas estarán en un silo soterrado en la ubicación actual.
Fuentes de Dalkia han informado de que adaptarán la entrada de acceso de camiones para depositar las astillas, operación que se realizará como máximo dos veces por semana en invierno, en un máximo de una hora y durante las clases para evitar peligros a los alumnos del Miguel Hernández. Según Cartiff no será necesario activar las tres calderas a la vez y se mantendrá el gas como suministro alternativo en caso de avería.
En cuanto a las preocupaciones de algunos vecinos por el precio y el suministro de biomasa, Dalkia ha garantizado su aprovisionamiento a un precio fijo definido por contrato y proveniente de una plantación de la entidad, de la que obtiene 60.000 toneladas al año. Dalkia también ha incidido en el respeto al Medio Ambiente del plan y en la importancia de la colocación de contadores y termostatos individuales en cada vivienda, lo cual ya iba a ser imperativo por ley a partir de 2017.
Detalles económicos
Tal y como se viene informando desde la primera reunión de vecinos, celebrada el 15 de junio de 2013, el proyecto Cityfied supone un plan transversal de eficiencia energética en el que se invertirán en Torrelago nada menos que 16,5 millones de euros. Ocho de ellos los aporta, a fondo perdido, la UE, a través de una subvención dirigida a Cartif, el centro tecnológico que coordina el proyecto. Este, gracias a la aportación de Dalkia y 3IA (otras de las 18 entidades asociadas al consorcio del proyecto) adelanta los 8,5 millones restantes para la ejecución de las recién comenzadas obras.
Los vecinos de la primera y segunda fase comenzarán a pagar, a partir de 2017 y 2018 respectivamente, la amortización de las obras en fachadas y en la red de calor, los dos ejes que vertebran el proyecto. Ello se llevará a cabo a través del pago de la energía, incluido en la cuota de la comunidad, mes a mes, hasta que se amortice el total de la inversión por cada vivienda, que estará en torno a 6.700 euros. Esto se abonará a lo largo de un periodo de entre 20 y 25 años, con un interés del 4,7% incluido en el precio final. Según Dalkia el importe de la cuota no aumentará, ya que es precisamente a través del ahorro energético (que se espera que sea superior al 40% después de las reformas) con el que se financiará la amortización.
El Ayuntamiento afirma que se reinvertirá el dinero de las licencias en Torrelago
El Consistorio, como socio necesario a nivel técnico e institucional de este proyecto, ingresará un total de 190.000 euros por la dedicación de funcionarios a gestiones del proyecto y aproximadamente otros 500.000 en concepto de licencias de obra. El propósito del equipo de gobierno municipal es reinvertir el importe recaudado, entre otras cosas, en la reparación de la red de abastecimiento de agua de Torrelago. Por otro lado, 3IA ha anunciado que para la ejecución de las obras se contratará un número indeterminado de trabajadores durante sus tres años y medio de duración, dando prioridad a los vecinos de Torrelago.
Torrelago Opina sigue manifestándose contra el proyecto tras su intento de impugnarlo
A pesar de que las obras han comenzado con relativa normalidad, algunos vecinos contrarios al proyecto (que llevan meses mostrando su oposición bajo la bandera de la agrupación Torrelago Opina) han protagonizado algunas protestas en los últimos días. Lo cierto es que algunos vecinos llevan meses afirmando que no se ha informado suficientemente a los propietarios y estimando posibles problemas de índole medioambiental y de seguridad. Pese a que en las asambleas de vecinos del pasado año se obtuvo el voto favorable de 536 vecinos frente a 88 en contra (el voto de los vecinos ausentes se dio por afirmativo, tal y como indica la ley, llegando a un resultado de más del 80% de los vecinos a favor) algunos propietarios siguen cuestionando la legitimidad de las votaciones. Su oposición se ha dejado notar en las reuniones informativas del proyecto, así como se ha notado en los últimos plenos del Ayuntamiento.
El secretario de Torrelago Opina, José López Matellanes, presentaba hace algunas semanas sendos escritos al Ayuntamiento y a las comunidades de vecinos solicitando la paralización cautelar de las obras. Argumentaban que “se ha denegado información técnica y económica a los vecinos y ha habido modificaciones gravísimas en el plan”.
Laguna al Día ha intentado ponerse en contacto con Torrelago Opina sin obtener respuesta. Sin embargo, ha podido constatar que sus miembros recolectaron 40 euros por cada propietario contrario al proyecto con el fin de contratar los servicios jurídicos necesarios para impugnar el proyecto por vía judicial. De momento ya han presentado su solicitud en los tribunales, y a la espera de la resolución judicial pertinente las obras siguen adelante con normalidad.
Frente a las acusaciones y reivindicaciones de Torrelago Opina, los presidentes de las comunidades han asegurado que “no han existido cambios en el proyecto, que se ha expuesto toda la información y que los vecinos disconformes no han acudido a las reuniones informativas ni a resolver dudas a las secretarías”.